La gastrificación es un problema social que atañe a la salud y al futuro de la verdadera cocina.
El futuro aporta muchas cuestiones positivas, pero también acarrea problemas y dificultades que debemos solucionar.
La terrible gastrificación no sólo afecta a la calidad de los Restaurantes, también a la salud de los clientes.
La obesidad en España está afectando terriblemente a más de un 20% de la población.
En los últimos años se ha convertido en una pandemia muy preocupante debido al aumento de consumo de ultra procesados, por su abundancia y el bajo coste de compra de estos platos de baja calidad en relación con los productos frescos.
Las cocinas tradicionales nacen de la necesidad de sacar el mayor partido a sus productos locales. La Gastrificación por la exigencia de la rentabilidad.
La tradición de nuestra cultura mediterránea, de sus diferentes temporadas, con sus propias culturas y tradiciones siempre se han reflejado en nuestros Restaurantes
Un Restaurante siempre ha formado parte del patrimonio de nuestra cultura. Ha reflejado tradiciones que nacen en la tierra o en el mar y finalizan en la mesa.
Los Restaurantes deben acostumbrarse a dejar de utilizar productos de cuarta, quinta y sexta gama. Porque si no cocinan, no son restaurantes ni cocineros.
Entre cocinar y no cocinar hay una gran diferencia. Hay que volver a cocinar.